viernes, 30 de noviembre de 2012

Humor para Llorar


Más barato por docena

Primer acto: 1 pollito rezando 
Segundo acto: El mismo pollito rezando. 
Tercer acto: El pollito rezando. 
¿Como se llamó la obra? 
A DIOS LE PIO 

¿Qué le dice un físico a una física?
Entre nosotros no hay química. 

¿Que enfermedad tiene el oso que no quiere vivir ni en el polo sur ni el polo norte?
Trastorno bi-polar 

Tu futuro depende de tus sueños, ¡No pierdas más tiempo y vuelve a dormir! 

¿Qué creen que hacen tres mujeres en una isla?
Se unen dos para criticar a la otra.

Un hombre estaba sentado dentro de un bar mirando su bebida. Pasa media hora mirando el vaso fijamente. En eso, llega un camionero que se para junto a él, le quita su bebida y se la toma toda de un solo trago. El pobre hombre empieza a llorar desconsoladamente. El camionero le dice: 
- Uy, no llores, mira, te compro otra bebida. No puedo ver llorar a otro hombre. 
- No, no es eso. Hoy ha sido el peor día de mi vida. Primero, me quedé dormido y llegué tarde a una junta muy importante. Mi jefe, enojadísimo, me despidió. Cuando salí del edificio, me di cuenta de que me habían robado el coche. La policía dice que no puede hacer nada. Me fui en un taxi a casa y después de que me bajé, me di cuenta que había dejado mi cartera en el taxi. Entro a casa y me la encuentro a mi mujer acostada con mi mejor amigo. Salí de la casa y vine a este bar... y cuando pensaba quitarme la vida, llega usted y se toma el veneno... 

Ella tenía dos deseos finales. 
Primero, quería ser incinerada. Y segundo, ella quería que sus cenizas fueran esparcidas por el Centro Comercial. 
- ¿Por qué en el Centro Comercial? -le preguntaron. 
- Para estar segura de que mis hijas me visitaran por lo menos dos veces por semana. 

Estaba una madre y su hijo pidiendo limosna y la madre se puso a llorar. 
Su hijo la consoló: 
- No llores mamá, cuando yo sea rico, solo tendrás que pedir para ti. 

En el funeral de un albañil, un hombre desconocido por la familia llora amargamente, se le acerca la mujer del difunto y le dice: 
- ¿Usted era amigo de él? 
- Sí. 
- ¿Lo quería mucho? 
- Sí, sus últimas palabras fueron para mí. 
- ¿Ah sí? ¿y cuáles fueron? 
- ¡Mariano, no muevas más el andamio, baboso! 

¿Por que en Cuba nadie sabe nadar? 
- Por que los que saben nadar están en EE.UU. 

Dos amigos se encuentran en la calle. 
Uno de ellos va acompañado de su anciana madre: 
- ¡Hola, Mario, cuánto tiempo...! ¿Qué es de tu vida? 
- Pues aquí estoy con mi madre, que la pobre se ha quedado sorda y ciega... 
- ¡Vaya, cuanto lo siento!! ¿Y la llevas ahora al médico? 
- No, no... Voy a que le corten la luz y el teléfono. 

Están 2 viejitas sentadas en sus mecedoras, y una le dice a la otra: 
- ¿Cómo se llama el alemán ese que nos tiene locas? Hitler, Heisemberg.... 
- Alzheimer, querida, es Alz-hei-mer. 

Cuando iba a una boda, todas mis tías y señoras mayores se me acercaban, picándome las costillas, entre risas, para decirme: "El siguiente eres tú ¿no?"
Dejaron de joder después de que yo empecé a decirles lo mismo en los funerales.

De Pepito:
Pepito le pregunta a la profe: 
- Profe, ¿usted me castigaría por algo que yo no hice? 
- Claro que no, pepito. 
- Ahh, pues que bien, porque hoy no hice mi tarea.

Entran 2 chicos al aula, y la maestra le dice a uno de ellos: 
- Juanito, ¿por qué llegó tarde? 
- Es que estaba soñando que viajaba por todas partes, conocí tantos países, y me desperté un poco tarde. 
- ¿Y usted, Pepito? 
- ¡Yo fui al aeropuerto a recibirlo! 

- Pepito, lávate bien que esta noche viene a cenar tu abuela.
- ¿Y por qué, acaso me va a cenar a mí?

Le pregunta el tío a Pepito: 
- hijo ¿y como te va con tu padrastro? 
- muy bien tío fíjate que todas las mañanas me monta en el bote y me lleva al centro del lago y allá me empuja, entonces yo vuelvo nadando solito hasta la orilla. 
- hijo ¿y no te cuesta mucho llegar?
- no tío lo que más me cuesta es desatarme y salir del saco.

La maestra le pregunta a Pepito: 
-Si yo digo fui rica, es tiempo pasado, pero si digo soy hermosa, ¿qué es? 
-Exceso de imaginación. 

El profesor repartiendo las notas: 
Luisito un diez. 
Pedrito un ocho. 
Juanito un seis. 
Pepito un cero. 
Oiga profesor, ¿Y por qué a mí un cero? 
Porque has copiado el examen de Pedrito. 
¿Y usted cómo lo sabe? 
Porque las cuatro primeras preguntas, están iguales, y en la última pregunta Pedrito respondió: "Esa, no me la sé" y tu has puesto: "Yo tampoco". 

- Mamá, Mamá, en la escuela me dicen Sherlock Holmes. 
- ¿Quien hijo? 
- Cállate, yo hago las preguntas 

El niño que llega a su casa llorando, se va para la cocina y le dice a la madre 
- Mamá, mamá, en el colegio me dicen peludo 
Y la madre sorprendida contesta al marido  
-¡Mauricio, Mauricio el perro está hablando! 

- Papá, papá, ¿vos te casaste por la iglesia o por el civil? 
- ¡Por estúpido! 

Mamá!, ¡mamá!, en el colegio me dicen: "jabón en polvo" 
-No te preocupes, Ariel. 

- Mamá, mamá, ¿Por qué papá está calvo? 
- Porque es muy inteligente y tiene muchas cosas en que pensar. 
- Entonces, ¿Por qué tú tienes tanto pelo? 
- ¡Cómete la sopa! 

- Mamá, mamita, ¡En la escuela dicen mis compañeros que soy un distraído de lo peor! ¿Verdad que no es cierto? 
- Niño, tú vives enfrente. 

- ¡Mamá, mamá, en la escuela me dicen dientón! 
- No le hagas caso hijo, pero cierra la boca que me estás rayando el piso. 

- ¡Mamá, mamá, afuera está frío! 
- Bueno, dile que pase. 

- Mamá, mamá, están golpeando la puerta. 
- Déjala, que se defienda sola 

- ¡Papá, papá un huracán se llevó el auto! 
- Imposible hijo, yo tengo las llaves. 

- Papá, papá, la abuela se tambalea. 
- ¡Entonces, dispárale otra vez! 

Mamá, mamá, ¡En la escuela me dejan solo! 
¿Mamá, mamá? ¿Mamaaaaaaaaaaaaá? 

- Papá, papá, ¡Mi mamá está corriendo como loca por la calle! 
- ¡Cállate y acelera! 

- Mamá, mamá, ¡En el colegio me dicen feo! 
- No les hagas caso hijito, y regresa a tu jaula 

- ¡Mamá, en el colegio me dicen cebolla! 
- Ay hijito, ya vete que me estas haciendo llorar... 

- Papá, ¿las vacas fuman? 
- ¡No, hijo! 
- ¡Entonces, se está quemando el establo! 

- Mamá, mamá, ¡En el colegio me llaman hijo de vaca! 
- Muuurmuraciones hijo, muuuurmuraciones 

Martín estaba trabajando, cuando su jefe le pregunta: 
- ¿No va a ir al velorio de su suegra? 
Y él le dice: 
- No jefe, primero el trabajo, después la diversión. 

¿En qué se parecen las mujeres a los huracanes? 
En que llegan fuertes y salvajes y se van con tu carro y tu casa. 

¿Cuál es el colmo de un sordo? 
Que al morir le dediquen un minuto de silencio.